La Biblia habla acerca de tu salvación. Lee las siguientes escrituras de La Biblia Amplificada para que saborees lo que Dios tiene preparado para ti!

• 2 Samuel 22:3: “Mi Dios, mi Roca; en Él me refugiaré; mi Escudo, la Fuerza de mi salvación, mi Fortaleza y mi Refugio, mi Salvador —Tú me guardas de la violencia—”.
• Éxodo 15:2: “El Señor es mi Fuerza y mi Canción, Él se ha convertido en mi Salvación; él es mi Dios y yo lo alabaré, el Dios de mi padre, y yo lo exaltaré”.
• Isaías 61:10: “Me regocijaré en el Señor, mi alma se regocijará en mi Dios; pues me ha vestido con la salvación, me ha cubierto con Su manto de justicia, como a novio me atavió, y como novia adornada con sus joyas”.
• Lucas 1:69-79: “Y Él ha levantado un Cuerno de salvación [un poderoso y valiente Ayudador, el Autor de la salvación] para nosotros en la casa de Su siervo David ––Éste es el que Dios prometió por medio de la boca de Sus santos profetas desde los tiempos más antiguos [que están en la memoria del ser humano]—. Para que obtengamos libertad y seamos guardados de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos detestan y persiguen con odio; para hacer una verdad y mostrarnos la misericordia, compasión y bondad [prometida] a nuestros antepasados, a fin de recordar y llevar a cabo Su santo pacto [para bendecir, lo cual es más sagrado porque es hecho por Dios mismo], ese pacto que Él selló por juramento con nuestro antepasado Abraham: Para darnos, siendo liberados de las manos de nuestros enemigos, la oportunidad de servirle sin ningún temor en santidad (consagración divina) y justicia [de acuerdo con los principios eternos de la justicia] en Su presencia todos los días de nuestra vida. Y tú, pequeña, serás llamada profeta del Altísimo; pues te presentarás ante la presencia del Señor para preparar Sus caminos [Isaías 40:3; Malaquías 4:5] para traer y darle a conocer la salvación a Su pueblo en el perdón y remisión de sus pecados. Porque a través de la misericordia y bondad de nuestro Dios, una Luz de lo alto amanecerá sobre nosotros y nos visitará [Malaquías 4:2] para que brille y le dé luz a aquellos que están en tinieblas y en la sombra de la muerte, para dirigir y guiar nuestros pies en línea recta en el camino de la paz [Isaías 9:2].
• Mateo 6:33: “Más bien, busquen (enfóquense y luchen por conseguir) primero el reino de Dios y Su justicia [Su manera de ser y hacer lo correcto], y todas estas cosas les serán añadidas”.
• Salmos 27:1: “El Señor es mi Luz y mi Salvación –¿de quién temeré?–. El Señor es el Refugio y Fortaleza de mi vida –¿de quién he de sentir temor?–”.
• Salmos 37:39: “Mas la salvación de la justicia [siempre] es del Señor, Él es su refugio y su Fortaleza segura en el tiempo de la tribulación”.
• Salmos 62:6 “Él es mi Roca y mi Salvación; Él es mi Defensor y mi Fortaleza; por tanto, no seré movido”.
• Juan 3:16: “Porque con gran amor y precio alto amó Dios al mundo que [hasta] entregó a Su (unigénito) Hijo, para que todo aquel que crea (confíe, se aferre, y descanse) en Él y no se pierda (o se destruya), sino tenga vida eterna”.
• Romanos 10:13: “Para que todo el que invoque el nombre del Señor [invocándolo como Señor] sea salvo [Joel 2:32]”.
• Romanos 10:9: “Porque si reconoces y confiesas con tus labios que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón (sujetándote, creyendo y descansando en la verdad) que Dios lo resucitó de la muerte, serás salvo”.
• Romanos 1:17: “Porque por medio del evangelio se revela la justicia de Dios, ambas se revelan por medio de la fe y son guiadas por la fe [que se revela a través del camino de la fe, despertando más fe]. Como está escrito: El hombre que por medio de la fe es justo, permanecerá firme y vivirá por fe [Habacuc 2:4]”.
• Romanos 3:21-23: “Pero ahora la justicia de Dios ha sido revelada de manera independiente, y apartada de la Ley, aunque en realidad es comprobada por la Ley y los profetas, en especial ante la justicia de Dios la cual se obtiene creyendo con la confianza personal y dependiendo confiadamente en Jesucristo (el Mesías). [La cual está a disposición de] todos los que creen. Porque no hay distinción, pues todos pecaron y están apartados de la honra y gloria que Dios ofrece y recibe”.
• Romanos 5:8: “Sin embargo, Dios nos muestra y comprueba con claridad Su [propio] amor por nosotros, en el hecho que aunque aún permanecíamos pecadores, Cristo (el Mesías, el Ungido) murió por nosotros”.
• Romanos 6:23: “Porque la paga del que pecado es muerte, pero la dádiva [generosa] de Dios es vida eterna a través (de nuestra unión con) de Jesucristo nuestro Señor”.

Y como siempre, si necesitas a alguien para que se ponga de acuerdo contigo en oración, por favor llama a nuestros ministros de oración, o envía una petición de oración. Cualquier día del año, a cualquier hora del día ya sea de día o de noche, ¡estamos aquí para ti!