Ora y permite que tu vida sea un claro ejemplo del amor de Dios. Quizá estas dos acciones sean las formas más efectivas en que puedes ser un instrumento para dirigir al Señor a aquellos que se preguntan si en realidad existe un Dios verdadero.
Recuerda, la bondad de Dios lleva al ser humano al arrepentimiento, como dice en Romanos 2:4. Por tanto, tu constante amor y tu apoyo en oración ayudarán a derribar su resistencia al Señor. Y al final, la única forma en que acepten a Jesús como su Señor, será cuando reciban una revelación personal del amor de Dios. El amor es la clave, pues el amor es lo que separa al Dios de la Biblia de los falsos dioses del mundo (1 Juan 4:16).
Te animamos para que no te rindas. Puedes estar seguro de que las palabras de amor y de ánimo que tú has declarado, producirán resultados. En Isaías 55:11 dice: «así también mi palabra, cuando sale de mi boca, no vuelve a mí vacía, sino que hace todo lo que yo quiero, y tiene éxito en todo aquello para lo cual la envié».