“Bendito sea el nombre del SEÑOR. Porque cosas gloriosas se están manifestando en este tiempo. Cosas extraordinarias y maravillosas están ocurriendo. En muchas partes del mundo y para muchas personas, parece que son cosas desastrosas y terribles las que están sucediendo, y así es. Según ellos, éso es lo que aparentemente está ocurriendo. Eso es lo que está pasando en la superficie. Sin embargo, a medida que Mi pueblo permanece firme y ora, Yo estoy sanando las naciones. Mi pueblo ha comenzado a levantar su voz en arrepentimiento, y a volverse de sus malos caminos, y Yo los escucho. No, éste no es el final de los Estados Unidos de América. ¡Éste es el comienzo de una NUEVA NACIÓN! ¡Aleluya! Éste no es el final de Haití. ¡Éste es el comienzo de una NUEVA NACIÓN! Éste no es el final de Chile. ¡Éste es el comienzo de una NUEVA NACIÓN!”